Hoy estuve en La Casona de Pau Bermejo, en la calle Viana, La Laguna y no puede decir más que una palabra ¡E-S-P-E-C-T-A-C-U-L-A-R!
El sitio increíble, un remanso de paz en pleno Centro de La Laguna, el brunch que degustamos no tengo palabras: un regalo al paladar y sobre todo la atención profesional de su personal.
En la hora que fuimos estaba trabajando un camarero con una vocación de servicio apabullante. Creo recordar que se llamaba Iván. Un malagueño con todo el salero y la exquisitez profesional del mundo. Y por otro lado, una camarera (siento no recordar su nombre), de Mallorca y con raíces extremeñas (creo recordar).
En ambos casos, personas muy cercanas, profesionales y competentes. Ya solamente por ellos vale más que la pena repetir.
Y al Chef Pau Bermejo quiero felicitarle por estar al frente este proyecto y desearle que siga mantenido su talento tanto en los fogones como eligiendo colaboradores.
Y a ti, que estás leyendo este post tan solo decirte que estás tardando en ir a La Casona.
