Me parece necesaria esta iniciativa de José Vicente Bustamante. Al margen del partido al que pertenezca me parece muy interesante su propuesta y la voy a secundar.
Porque a través de comportamientos como este podemos reivindicar que lo importante son las personas, por encima del mercado, el consumo y por supuesto de las grandes superficies. Porque no pasa nada si un día no consumes y porque de esta forma damos una señal muy nítida al mercado: que al final son los consumidores quienes eligen y marcan los nuevos tiempos.
Me comprometo a ello. No iré el día 15 de agosto a comprar al Horno de Pan. Desayunaré con pan de molde que compraré el día anterior y tampoco iré al Supermercado del chino a comprar el agua como cada semana. Aunque el supermercado sea una empresa familiar lo haré, ¿quién sabe? a lo mejor les da por pensar y coger ese día de descanso en un próximo año.
No se va a venir abajo el PIB por una jornada así. Ni subirá la tasa de desempelo. Y a cambio se ganarán muchos desayunos en casa, y por supuesto, muchas tardes felices de cine y pijama.
Porque el mundo necesita más tiempo para su familia y menos para consumir.